Presidente de Fedecarne: "Podemos duplicar la produccción"
4 de julio de 2011
En marzo se observaba una recuperación en el beneficio de ganado bovino. Sin embargo, las cifras de abril muestran una importante caída: 20% menos de carne producida en Chile en relación a 2010. Con ello, durante esta temporada la producción nacional ha caído 8%.
Más aún, las producciones mensuales de 2011 son las más bajas de los últimos dos años.
Sin embargo, los precios siguen firmes: el valor de los animales para faena en mayo fue alrededor de 30% más alto que en mayo de 2010.
Esto, pese a que se ha debilitado algo en relación a meses anteriores, lo que no parece ser compatible con una menor oferta, pero podría tener una explicación en la competencia de las carnes importadas, cuyo precio medio, expresado en pesos, ha bajado levemente, señala la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa) en su informe del mes de mayo.
A juicio del presidente de la Federación Nacional de Productores de Carne (Fedecarne), Christian Arntz, se trata de un escenario de largo plazo. “Uno podría pensar que esta alza y estabilidad de precios es algo coyuntural. Pero a mi modo de ver es estructural. Lo coyuntural sería que mañana hubiera una baja en los precios. Pero lo estructural es que se mantengan altos en el largo plazo”, señala.
Pero ¿cómo se hace para bajar esta realidad internacional al plano local? A juicio de Arntz, ésta es una buena oportunidad para analizar y revisar desde el punto de vista ganadero, cómo están produciendo.
“Seguramente esto implicará un alto costo adquirido anteriormente. Pero esto nos permite sanearnos y dejar algo para hacer inversiones. Sobre todo para prepararnos para aquellas coyunturas en que los precios estén más bajos. Invirtiendo en productividad, en eficiencia y gestión. Esto nos permitirá capear algún mal momento y ampliar nuestro margen. El precio no lo podemos manejar, pero el costo sí”, sostiene.
Hay dos cosas fundamentales que según el dirigente gremial pueden marcar un punto de inflexión para los productores chilenos.
Uno de ellos es ser más eficiente en producción. “Si tomamos la generalidad de los ganaderos, nos damos cuenta que existe una muy baja productividad por hectárea en comparación a otros países. Fácilmente podemos duplicar nuestra producción, sin mucha inversión”, comenta. El segundo punto son los canales de comercialización. “Para ello es clave abrir nuevos mercados, pero también transparentar el mercado interno”, advierte.
engorda
Uno de los datos que se expresa en las cifras que recoge Odepa, es la tendencia a la retención de vientres de los últimos meses.
En efecto, ha continuado la reducción en el faenamiento de terneros y terneras que se observa en los últimos años. Todo esto muestra la buena disponibilidad de forraje que ha existido en 2011 y el interés por el negocio de la engorda de animales, dado el buen escenario de precios para el ganado en pie.
Fuente: Revista del Campo Sureño
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