El análisis agrícola al discurso del 21 de mayo
30 de mayo de 2011
651 palabras dedicó el Presidente de la República, Sebastián Piñera, a la agricultura, durante la cuenta pública dada ante el Congreso el pasado 21 de mayo.
Un discurso que generó apoyo y dudas en el mundo agrícola nacional.
En los gremios agrícolas de San Carlos y Ñuble, consideran que el Presidente no ha cumplido los 25 compromisos adquiridos con la agricultura. Y por ello se sumarán a las movilizaciones convocadas para esta semana en la Sexta Región por Fedefruta (ver nota al margen).
Más al sur, el presidente de la Sociedad Agrícola y Ganadera de Osorno (Sago), Tomás Erber, valoró lo que tiene relación con la competencia desleal, y remarcó que esperan que los aspectos pendientes comiencen a aplicarse pronto, sobre todo en cuanto al mejoramiento de la Comisión de Distorsiones.
Lo cierto es que Sebastián Piñera mencionó una serie de medidas que ya se están aplicando, pero de paso anunció algunos proyectos que deberían ver la luz pronto, previo paso -muchos de ellos- por el Congreso Nacional.
El Presidente afirmó que están impulsando una “verdadera política de Estado en favor del mundo rural”, y especialmente de los productores pequeños y medianos y de la agricultura familiar campesina. En total, más de dos millones de personas que viven o trabajan en el campo, según cuantificó el Mandatario.
Entre lo que ya se hizo, Piñera mencionó que recientemente se aprobó el proyecto que extiende de dos a cuatro años el plazo de aplicación de salvaguardias. “Y estamos trabajando en fortalecer el funcionamiento de la Comisión de Distorsiones. Además, creamos el sistema de muestras y contramuestras y una oficina especializada, dentro de la Fiscalía Nacional Económica, para prevenir atentados y abusos a la libre competencia agrícola”, explicó en relación a la competencia desleal acusada por años por parte de los gremios agrícolas.
al futuro
En cuanto a la pequeña agricultura, el Mandatario señaló que se incrementó en 2011 el presupuesto de Indap, para aumentar de 53 mil a 88 mil el número de pequeños agricultores beneficiados a través del programa Prodesal. El objetivo posterior, es llegar a 150 mil productores atendidos.
En relación al riego , tras recuperar la infraestructura dañada por el terremoto, anunció que se están realizando nuevas inversiones en el sector. La idea es incorporar este año, ocho mil nuevas hectáreas al riego y tecnificar otras 20 mil.
En materia forestal, este año el ejecutivo presentará un proyecto de ley para combatir a la desertificación, recuperar suelos erosionados, mejorar la retención hídrica y prevenir incendios forestales, ampliando las sanciones e incorporando la responsabilidad civil de quienes los ocasionen.
En tanto, se espera enviar un nuevo proyecto de ley de pesca que permita compatibilizar el desarrollo del sector, incluyendo la pesca artesanal e industrial, con la conservación del recurso pesquero.
Otro de los anuncios realizados por el Mandatario se relaciona con un viejo anhelo del sector. La transformación del actual ministerio en el Ministerio de Agricultura y Alimentos.
dólar
El dólar también estuvo presente. “Por cierto, este gobierno está muy consciente que la sólida situación de nuestra economía, el alza en los precios de nuestras principales exportaciones, las buenas perspectivas para la inversión extranjera, el debilitamiento mundial del dólar, han producido una apreciación de nuestra moneda y una caída en el precio del dólar, que ha dañado la competitividad de algunas de nuestras industrias exportadoras o sustituidoras de importaciones. La más sensible de ellas es la agricultura”, señaló el Mandatario.
Y aunque este efecto ha sido parcialmente compensado por mejores precios internacionales en varios de los commodities y alimentos que Chile exporta, comentó que apoyarán a los agricultores, incrementando sustancialmente las líneas de financiamiento a través de Corfo y BancoEstado para pequeños y medianos productores agrícolas.
El presidente de la Federación de Productores de Fruta de Chile (Fedefruta), Antonio Walker, dice que si bien en la Cuenta Pública 2011 se reconoce que el actual valor del dólar ha dañado la competitividad de algunas industrias exportadoras, siendo la más sensible la agricultura, no es cierto, que en el caso particular de la fruticultura, ésta pudiera compensar dicha baja con mejores precios internacionales.
En este sentido, mencionó el encarecimiento de la mano de obra, que en los dos últimos dos años, ha subido un 38% medido en dólares; el aumento de un 25% en los costos FOB (enfriado, embalaje y transporte de fruta) y 18% de los costos CIF (barco, seguro y desembarque), a lo que se suma la sostenida baja del tipo de cambio que, en términos nominales, ha caído un 10% respecto del año anterior.
El presidente de la Asociación Gremial Unión Nacional de Organizaciones de Productores de la Agricultura Familiar Campesina, Unaf Chile, Daniel Rebolledo, considera que el Gobierno aún está en deuda.
A su juicio, se requiere más celeridad para poner en funcionamiento programas como los relacionados con los suelos degradados. “Hay posturas en las que estamos de acuerdo, pero nos deja muy preocupados la lentitud con que se están provocando estos cambios. No sé si es por trabas burocráticas o qué”, señala el dirigente.
El presidente de la Federación de Cooperativas Campesinas de La Araucanía, Esteban Díaz, destacó que falta mucho por hacer, por ejemplo en tecnificación de la pequeña agricultura. “En el campo todavía hay personas que siembran con bueyes. Y eso no puede ser. Cómo vamos a ser potencia alimentaria sin superar esto”, cuestionó el productor.
Fuente. Revista del Campo Sureño.