El agro tiene el dólar entre ceja y ceja
10 de enero de 2011
No es lo mismo exportar con un dólar a 465 pesos que a 495. Eso lo saben bien los empresarios ligados a la industria de los berries, una de las más afectadas por la baja que había mostrado el tipo de cambio durante 2010.
Así, aunque valoran la intervención del valor de la moneda norteamericana por parte del Banco Central, la consideran un poco tardía, pues parte de la producción -de la zona central principalmente- ya se vendió a un precio “poco competitivo”.
Lo cierto es que consideraciones más o menos, la intervención del tipo de cambio era algo esperado con ansias en el mundo del agro.
Ya lo decía Tomás Erber, presidente de la Sociedad Agrícola y Ganadera de Osorno en noviembre en la inauguración de la Fisur: “Hoy nuestra agricultura tiene un gran problema. Vemos que rubros como la carne, leche y frutales, con excelentes posibilidades de desarrollo en los mercados de exportación, pierden competitividad gracias a un tipo de cambio que no nos favorece”.
De hecho, días antes del anuncio del instituto emisor, la Sago señalaba que la situación era crítica. “De mantenerse la actual situación cambiaria, muchos buenos empresarios se verán obligados a salir del negocio y muchos buenos trabajadores dejarán de trabajar en esta actividad, generándose mayor concentración y un costo social enorme el cual el país deberá hacerse cargo más temprano que tarde”, señalaba la entidad en una declaración pública.
Hoy, con un tipo de cambio que escaló cerca de los 500 pesos, los análisis y las proyecciones son más optimistas, aunque cautelosas.
“Esta medida nos va a perm
itir recuperar el optimismo para seguir con nuestras inversiones y pensando en un futuro más promisorio, pero es un poco prematuro empezar a cantar victoria en este minuto”, señalaba el presidente de la Sociedad Nacional e Agricultura, Luis Mayol, tras conocer la noticia.
Por su parte, el ministro de Agricultura, José Antonio Galilea, considera que la decisión del Consejo del Banco Central al anunciar la intervención del mercado cambiario, a través de un programa de compra de divisas por un valor de US$12.000 millones, permitirá mejorar la competitividad y las inversiones del sector agropecuario para este año.
En el sector lechero, el presidente de Fedeleche, Dieter Konow, cree que la intervención del Banco Central, junto a la fortaleza de los precios de leche a nivel mundial “permite proyectar una recuperación importante del proceso exportador”.
Como datos, el precio internacional de la leche en polvo ha subido cerca de un 25% desde que las procesadoras nacionales anunciaron la última baja a fines de agosto; y la principal empresa neocelandesa, Fonterra, (que controla en Chile a Soprole) anunció un incremento de 7% para sus proveedores de leche.
Christian Arntz, presidente de Fedecarne: “En estos momentos, como habían precios relativamente altos, aunque el dólar estuviera bajo, seguían siendo precios atractivos (...) yo diría que la medida se implementó justo a tiempo para la leche y la carne, pero los frutales estaban más complicados, sobre todo en el norte”.
Luis Mayol, presidente de la SNA: “Estos anuncios hacen eco de la delicada situación que hace algún tiempo veníamos planteando y nos devuelve la confianza para seguir trabajando en pos del fortalecimiento de la competitividad de la agricultura de exportación y de sustitución de importaciones”.
Ronald Bown, presidente de la Asociación de Exportadores: “Se debe evaluar seriamente la instalación de un Fondo de Estabilización Competitiva para evitar que este tipo de desequilibrios vuelvan a ocurrir, colocando en riesgo el futuro de la oferta exportadora del país, que no puede limitarse a la minería”.
Rodrigo Francois, presidente Aproleche Araucanía: “La tendencia sostenida al alza en el precio internacional de la leche en polvo y la intervención cambiaria dispuesta por el Banco Central, son señales concretas que debieran traducirse a la brevedad en un precio de la leche fresca pagado a los agricultores acorde a esta nueva realidad”.
Fuente. Revista del Campo Sureño.