Nuevas tendencias de consumo en el mercado de las carnes
16 de marzo de 2018
Según un estudio de Mintel de diciembre de 2017, los consumidores se preocupan cada día más por aspectos como la sostenibilidad en los productos cárnicos.
En la misma línea, un informe de Nielsen señala que: “Un 60% de los consumidores afirma esforzarse por realizar compras diarias saludables y un 46% intenta comprar productos respetuosos con el medio ambiente”.
A ello se suma la cada vez mayor importancia que tiene la proteína animal en la dieta, especialmente la carne, para un mejor desarrollo físico y mental. Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que los niños, a partir de los 6 meses, coman alimentos de origen animal para su desarrollo neurológico y crecimiento celular.
Según el informe de Mintel, el 68% de los consumidores de Reino Unido creen que los productos cárnicos deberían incluir más información sobre el producto en la etiqueta. Esto mismo también lo refleja un estudio de Innova Marketing Insights sobre los productos alimenticios. “Los consumidores en 2018 continuarán centrando su interés no sólo en los aspectos saludables de los ingredientes de los alimentos, sino también en el etiquetado, la forma de producción y el envasado.”
En Estados Unidos, el 34% de quienes compran productos cárnicos consideran como el factor más importante que la carne sea 100% natural. Mientras que para el 20% de los consumidores de Brasil lo que más les preocupa es la seguridad e higiene en los procesos de producción.
La trazabilidad también es un factor que preocupa, los consumidores quieren saber más acerca del origen del producto, las granjas y los procesos de producción.
Así también, los consumidores millenials están dispuesto a pagar más a cambio de productos cárnicos sostenibles, de mayor calidad y que velen por el bienestar animal.
Las tendencias de consumo indican que la innovación en el sector cárnico ha de orientarse hacia tres aspectos claves: lo saludable, sostenible y seguro. Aquellas empresas que así lo entiendan, además de obtener la confianza de los consumidores, mejorarán su competitividad y verán cómo esto se traduce positivamente en sus resultados.
Fuente: AINIA– Universidad de Chile