Las propuestas del agro para los aspirantes a la moneda
5 de noviembre de 2013
En el marco de la ExpoSofo 2013, productores y empresarios agrícolas lanzaron sus propuestas de políticas públicas para potenciar la competitividad del sector. Siguiendo la línea de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), organismo que en el Encuentro Nacional del Agro planteó los retos que debería asumir el próximo gobierno, los agricultores de la zona dieron a conocer sus expectativas adportas a las elecciones presidenciales del 17 de noviembre.
Como suele ocurrir en esta muestra agrícola, vitrina del quehacer productivo de la zona centro-sur, fue el presidente de la Sociedad de Fomento Agrícola y Ganadero(Sofo), quien abrió el debate. A juicio del dirigente gremial el principal desafío es mantener el Estado de Derecho en La Araucanía e insistió en que es indispensable la solución definitiva del tema mapuche.
“Tenemos un grave problema que es el terrorismo rural. Todo el gremio agrícola está dispuesto a seguir trabajando y poniéndole el hombro a la Región. Independiente de los gobiernos que vengan se debe tomar este problema en serio, sin presiones y con los pies en la tierra. No podemos seguir haciendo más de lo mismo, porque los resultados van a seguir siendo los mismos, por eso para obtener resultados diferentes hay que hacer cosas diferentes y esas cosas hay que hacerlas con toda la gente involucrada en esto”, precisó.
En materias sectoriales, Caminondo reconoció los avances y el cumplimiento de buena parte de los compromisos asumidos por el gobierno actual para reactivar la agricultura. Valoró la rebaja en retención de IVA en el trigo y la intervención de Cotrisa, la promulgación de la Ley Muestra y Contramuestra y el proyecto de Ley de registros de Contratos Agrícolas, la Ley Antiabigeato, la identificación animal oficial y la revisión de la Norma Chilena de Tipificación de Canales.
“Nosotros no podemos dejar de reconocer que en el último tiempo se han evidenciado avances muy importantes, cosas que hace un tiempo atrás se nos decía que eran imposibles de realizar. Un ejemplo de ello es Cotrisa, organización que era impensada que funcionara y finalmente sólo era falta de voluntad. Finalmente se hizo y volvió a retomar un rol que era tremendamente importante para la agricultura familiar campesina principalmente. Ese es sólo un botón de muestra”, argumentó.
Para Caminondo es evidente el impulso del sector; sin embargo, recalcó que hay tarea pendiente; y en este escenario sostuvo que es vital que los futuros gobiernos comprendan a cabalidad el aporte del sector agropecuario al país.
Entre los desafíos planteados está superar las grandes falencias y deficiencias que afectan a la actividad agropecuaria nacional, entre ellas las de los Tribunales de la Libre Competencia y de la Comisión Investigadora de Distorsiones de Precios.
“Estas son instituciones a las que los agricultores y las Pymes en general , no podemos acceder fácilmente. Esperamos que se profundice mucho más su modernización”, acotó.
Un tema que también preocupa es el energético: “Los altos costos de la energía son otra materia que hace años dificulta nuestra actividad. El sector agrícola no puede mantenerse competitivo bajo un sistema productivo que obliga a cancelar mayores costos energéticos”.
COMPETENCIA DESLEAL
El productor agrícola Eduardo Renner, sostuvo que si bien existe un avance en transparentar los mercados, especialmente en el mercado de los granos, falta que la Comisión de Investigación de Distorsiones tenga una capacidad de operaciones más rápida, corrigiendo la competencia desleal provenga de una mala práctica de un país o un empresario nacional.
“Es necesario que esta institución actúe también cuando exista un daño inminente. Hasta ahora nuestra ley le permite actuar sólo cuando se puede acreditar el daño y eso es muy limitado. En los países desarrollados se actúa cuando hay posibilidades de que ocurra un daño, eso evita el desastre. La actual comisión de distorsiones detecta el daño, pero a veces éste es tan grande que a veces para ciertos productores es irreparable. Si un rubro se está enfrentando a una competencia desleal, la gracia es que esa competencia desleal se pueda detener a tiempo y no le afecte a su rubro”.
Otro punto que le interesa a Renner es la implementación de una fórmula que permita minimizar el impacto del inestable tipo de cambio. Al respecto, el agricultor argumentó que la mejor forma de amortizar los efectos del dólar es que los productores tengan acceso a créditos con la misma moneda.
“Lo que debería ocurrir es que como agricultores debiésemos tener acceso a créditos en la misma moneda. Hoy día tenemos peso, UF y para varios cultivos dólar (raps, la cebada e indirectamente al trigo). De esta manera si el dólar está más bajo el costo de internación del trigo también estará más bajo y eso también afecta. Esa disparidad entre la moneda de compra y la moneda de pago genera distorsiones”, recalcó.
Un tema que también es necesario considerar, a juicio de este agricultor, es la falta de lineamiento claros sobre la actividad productiva. Renner advierte que es vital que de manera transparente se determine los límites en que la agricultura podrá desarrollarse.
“Como agricultores nosotros entendemos las aspiraciones de los pueblos originarios, pero creemos que es necesario se hagan lineamientos sobre la actividad productiva, se debe tener claro los límites en que puede desarrollarse. En este minuto nadie lo tiene claro y en cualquier minuto cualquier agricultor se puede ver presionado a vender su territorio por una demanda y eso coarta mucho el desarrollo de esta Región”, precisó.
Renner agregó que “responsablemente creo que hay responder a las aspiraciones de los pueblos originarios de otras formas.Porque el suelo agrícola es limitado, porque lo ocuparon las ciudades y las empresas forestales. Sacar tierras del circuito productivo es un pecado y por dos razones. Primero porque es un recurso escaso que hay que usarlo para producir desarrollo y segundo porque cuando a una persona dedicada a la agricultura se le obliga a salir, esta persona jamás vuelve”.
La empresaria agrícola, Mónica Gebert, recientemente destacada por Anasac, precisó que el Gobierno ha cumplido gran parte de las promesas realizadas para el sector, pero aseguró que existe un tema pendiente: la seguridad. En esta materia aseguró que se está enfrentando a “terroristas rurales”.
“Considero que este Gobierno ha cumplido en más de un 90% su programa agrícola. Pienso que todo el trabajo de las alianzas productivas, el trabajo de Corfo asignando recursos a los pequeños productores es una buena iniciativa.Sin embargo, hay tareas pendientes y me preocupa un punto que tampoco estaba propuesto en el programa agrícola, se trata de la seguridad. Para mí no tiene que ver con el tema mapuche, yo tengo una muy buena relación con todos los mapuches de mi sector, esto es un tema terrorista a nivel nacional. Así como queman buses en Santiago aquí se queman predios y casas”, señaló.
Gebert cree que “se deberían disminuir la compra de tierras y trabajar bien las que se han adquirido para la Conadi. Para ese proceso falta tiempo, creo que se están desarrollando con las alianzas productivas muy bien, pero para generalizar este trabajo a este gobierno le faltó tiempo”.
GANADERÍA
En el ámbito ganadero, Gastón Caminondo, realizó un llamado para que el Instituto Nacional de Normalización (INN) acepte la propuesta de FedeCarne, de manera que prontamente el mercado chileno pueda diferenciar en los mostradores, el tipo de carne producida en Chile, de la carne cebú, proveniente de Paraguay y Brasil.
A Luis Amthauer, ganadero experto en la raza Angus, le preocupa el futuro del rubro. “Yo soy ganadero y siento pena porque esta actividad ha ido descendiendo durante los últimos años. Hay que hacer una labor en conjunto de Gobierno y agricultores para reimpulsarla. Tenemos varios espacios para tener carne de calidad, carne limpia, libre de todo tipo de enfermedades, pero hay otros rubros que han ido desplazando la producción de carne de nuestras praderas y no hay ninguna política gubernamental que nos protega”, insistió.
Amthauer asevera que el 50% de la carne que consume en Chile se importa, pese a tener las condiciones necesarias para abastecer el mercado interno e incluso levantar las exportaciones.
Para Enrique Sabugo, gerente y representante legal del Molino Gorbea, los avances en el sector afirmó que son evidentes, pero precisó que se debe apuntar con más fuerza al riego.
“Creo que ha habido un desarrollo importante en las políticas agrícolas de los próximos años y pienso que quizás habría que apuntar un poco más al riego. En esta Región, con excepción del embalse que se va a concretar, es importante avanzar en esta línea con obras menores. Hay que hacer un esfuerzo para masificar el riego”.
FINANCIAMIENTO
Eduardo Schwerter, presidente de Agrollanquihue, recordó que el Consorcio Agrícola del Sur (CAS) desarrolló un documento con propuestas para los presidenciales
El dirigente gremial afirmó que uno de los temas que preocupan al sector apunta al mejoramiento sustantivo de la transparencia de mercados.
“Esta es una situación que siempre de una u otra forma nos está rebotando, ya sea por distorsiones que tenemos que enfrentar con países extranjeros con importaciones que llegan con precios distorsionados y que finalmente afectan a la producción nacional o bien en algunos rubros existe posición dominante de ciertas empresa hacia los proveedores. Esto no lo podemos dejar al libre albedrío del mal llamado libre mercado y debe existir un marco regulatorio que lo autoriza la organización mundial de comercio”, precisó Schwerter.
El dirigente gremial agregó que lo que se está pidiendo no es la protección ni fijación de precios, sino que estén las reglas claras “y que los productores tengan un marco para que cuando haya distorsiones fundadas de productos importados exista esa regulación y opere por sí sola. De manera que las condiciones tiendan a nivelar la cancha”.
También salió a la palestra el financiamiento. En esta materia, Schwerter aseveró que para todos los rubros agrícolas y productivos es el capital de trabajo un tema complejo.
“Hoy hay una descapitalización bastante importante a nivel de productores, por lo tanto el acceso al financiamiento adecuado en tasas y plazos y relacionados con la actividad agrícola es necesario. Tienen que darse los lineamientos para que el acceso financiamiento sea un poco más asequible para los productos según nuestras distintas actividades.
Este último punto es compartido por José Miguel Inalaf, emprendedor mapuche, que ha puesto sus fichas en el sector.
“Se está en deuda con la pequeña agricultura familiar campesina. En esta línea es importante contar con instrumentos que te permitan acceder a créditos con tasas bajas. En este momento tú no existes para la banca y eso es complejo para la fruticultura por ejemplo”, argumentó Inalaf.
Fuente: Revista del Campo Sureño