La red de vigilancia que amenaza a los ladrones de ganado

1 de abril de 2013

Hasta el año 2011, Los Muermos, en la Región de Los Lagos, era la segunda comuna del país con mayor cantidad de abigeatos con 119 casos anuales. Dos años después, están en el lugar 65 y han logrado reducir la ocurrencia de estos delitos en 74%.

Pasaron de tener un promedio anual de 119 casos a 37 entre 2011 y 2012. Además la recuperación de animales vivos y las detenciones también aumentaron.

Esto fue posible a través de un innovador modelo de vigilancia compartido entre agricultores y Carabineros de Maullín y Los Muermos. El único en Chile.

Primero formaron una Agrupación de Pequeños Agricultores (APA) y una Comisión Antiabigeato, la cual además es la única capacitada para la recuperación de ADN y pelo de animal en el país.

Luego de la creación de la comisión postularon a recursos de 2% de seguridad pública del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) con los cuales lograron implementar a los agricultores con tecnología de punta. Por ejemplo, radios de comunicación y visores nocturnos para vigilar y evitar la ocurrencia de este delito que afecta a grandes y pequeños agricultores, generando en algunos casos pérdidas irrecuperables.

“Con esto nosotros hemos podido desarticular algunas bandas que estaba actuando en varios sectores, porque los mismos agricultores anotaban las patentes de los vehículos que andaban en las noches. Eso nos permitió crear una base de datos con los agricultores y comenzaron a hacer los chequeos y desarticular las bandas”, explica el mayor de la Tercera Comisaría de Maullín, Manuel Contreras, creador de este innovador programa.

Asimismo, coordinaron vigilancias nocturnas en puntos estratégicos en conjunto con Carabineros de Maullín y Los Muermos para hacer los recorridos.

“Nos ha resultado interesante el trabajo porque los agricultores están realmente comprometidos, porque están viendo que está llegando esta tecnología y se están disminuyendo sus problemas”, acota Contreras.

Además se instalaron casetas de vigilancia preventiva en los cruces más importantes de los caminos, las cuales tienen identificación anti abigeato; se instaló publicidad en los buses de la provincia; y se difundieron programas radiales.

Y los resultados ya están a la vista: en Moncopulli, Maullín, hoy no tienen registros de abigeato; antes había una tasa semanal de 8 a 10 ilícitos.

Si bien actualmente este trabajo de vigilancia se hace preferentemente con agricultores, la idea ahora es postular a otro proyecto para trabajar con un grupo de pequeñas agricultoras del sector de Minquihuen, en Los Muermos.

“Es una comunidad donde trabajan sólo mujeres, quienes se acercaron para asesorarlas. Y ahora les vamos a entregar un proyecto de seguridad ciudadana a 22 mujeres. Esto es súper innovador porque será la primera vez que participarán mujeres”, explica Contreras.

Además se está realizando un trabajo en coordinación con Carabineros de la Comisaría de Río Negro, para replicar este modelo en zonas rurales en la provincia de Osorno.

“Hicimos un diagnóstico de los lugares más críticos de Maullín y ahora estamos viendo que se está generando una movilidad del delito. Todo indica que se estarían trasladándose a Purranque y Puerto Octay, porque tienen terrenos muy extensos”, explica el mayor de la Comisaría de Maullín.



la Réplica


Considerando la buena experiencia de sus vecinos del sur, y como una medida concreta para frenar y disminuir los delitos de abigeato, los pequeños agricultores de la comuna de Purranque junto a Carabineros de la Segunda Comisaría de Carabineros de Río Negro, se encuentran implementando un sistema parecido de trabajo asociado.

Esto les permitirá enfocar sus esfuerzos en la compra de radios portátiles y visores nocturnos para combatir este ilícito al igual que en Maullín y Los Muermos.

El mayor de la Segunda Comisaría de Río Negro, Marcelo Lagos, encargado de este programa en Purranque, explica que esto es inédito en la provincia de Osorno. “Es primera vez que se va a hacer una estrategia de trabajo en conjunto con los agricultores a través de un sistema de vigilancia donde se incorpora a la comunidad”, remarca.

La estrategia es valorada por los pequeños agricultores de Hueyusca, sector rural purranquino.

Leonel Lafi, quien este verano sufrió la pérdida de un buey que fue faenado a metros de su casa, dejándolo sin su herramienta de trabajo, señala que la idea es positiva.

Y justamente el trabajo comenzará con los agricultores de los sectores rurales de Hueyusca, La Poza, Los Riscos y sus alrededores, al igual que las zonas más cercanas al radio urbano de Purranque, como Colonia Ponce, entre otros, donde también hay mayor incidencia de estos delitos.

Este trabajo se inició con la creación de una Comisión de Abigeato que se formó hace dos semanas en la Segunda Comisaría de Carabineros de Río Negro y que permitirá un trabajo en las comunas de Río Negro, Purranque y Puerto Octay.

El plan comenzó con los pequeños agricultores de Purranque, porque en la última estadística se observó que la comuna fue la que tuvo mayor aumento de denuncias por este ilícito, con 117% de alza. Entre enero a mayo de 2011 se contabilizaron 12 denuncias; y se elevaron a 26 en igual periodo de 2012.

Se trata de un problema que afecta a pequeños y grandes productores. Así se destacó en la última cuenta pública de la Fiscalía, donde se mostró que la provincia de Osorno alcanza el segundo lugar a nivel regional en este tipo de denuncias, sumando 281 al 30 de septiembre de 2012.

En base a todos estos antecedentes, el mayor Lagos explica que ahora queda esperar la conformación de la Agrupación de Pequeños Agricultores (APA), que se constituirá durante las próximas semanas.

Mientras tanto, trabajarán con las juntas de vecinos para formular los proyectos de financiamiento del plan.

Formulada la mencionada estrategia, los agricultores podrán optar al 2% del fondo especial de seguridad ciudadana que entrega el Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR). Y con estos recursos esperan adquirir en primera instancia radios y visores nocturnos para agricultores y Carabineros.

Para ello necesitan cerca de 9 millones de pesos. La idea es que las radios portátiles tengan conexión entre agricultores y también con Carabineros que permitirá facilitar la coordinación en cuanto a horas y lugares de guardia. También permitirá dar aviso en caso de constatar la presencia de sospechosos en el lugar.

Para la distribución de los equipos se privilegiarán aquellos agricultores que estén en lugares más apartados, en cruces de las rutas o los que estén cercanos a caminos públicos.

“Eso nos permitirá identificar el tráfico de vehículos desconocidos durante la noche, porque la idea es tener una comunicación oportuna, para que nosotros también concurramos al lugar de manera más rápida y así poder prevenir el ilícito”, explica Marcelo Lagos.

Además se realizarán rondas nocturnas y vigilancia de punto fijo en zonas estratégicas entre agricultores y Carabineros, lo que con el transcurso del tiempo se irá modificando de acuerdo a las evaluaciones y resultados que se obtengan.

Tomás Erber, presidente de la Sociedad Agrícola y Ganadera de Osorno (Sago) e integrante de la Mesa Antiabigeato que coordina la Gobernación Provincial desde hace algunos años, valora el proyecto. Pero sostiene que la labor de vigilar y resguardar la seguridad de sus animales no es tarea directa de los productores sino que de las policías. “Nosotros estamos para producir, no estamos para montar guardias de vigilancia”, plantea.

No obstante, reconoce que “Carabineros muchas veces hace lo que puede con los recursos que cuenta”.

La estrategia está en la línea de la Ley de Abigeato, que está en curso desde mediados de 2012 y que ha hecho caer en 30% estos delitos, merced de la nuevas atribuciones y herramientas para perseguir este tipo de ilícitos tanto para los policías como para los fiscales y el Servicio Agrícola y Ganadero.

Así lo reafirma el seremi de Agricultura de la Región de Los Lagos, Rodrigo Mardones, quien aclara que las denuncias disminuyeron significativamente entre 2011 y 2012 en un 19,8% en la zona, mientras que los detenidos en el mismo periodo aumentaron 21 por ciento.

“Es indudable que el mejor control que puede realizar Carabineros al tener también mayores atribuciones ha traído consigo una baja en la frecuencia de los abigeatos”, puntualiza.



Fuente: Revista del Campo Sureño